La inflación ya castiga el empleo en la industria, construcción y comercio

La inflación ya castiga el empleo en la industria, construcción y comercio

image_pdfimage_print
  • ENCUESTA DE POBLACIÓN ACTIVA/ En el primer trimestre del año se han perdido 100.200 puestos de trabajo, mientras que el paro se incrementa en 70.900 personas. Con ello, la tasa de desempleo vive su primer aumento desde el año 2020, hasta el 13,6%.

Pablo Cerezal. Madrid

A vista de pájaro, el empleo sigue creciendo con fuerza. El mercado laboral sumó 877.900 puestos de trabajo en el último año, hasta alcanzar los 20.084.700 empleos en el primer trimestre del año, de acuerdo con los datos de la Encuesta de Población Activa, publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Sin embargo, la actividad ya empieza a acusar síntomas de debilidad en gran medida debidos a la inflación que quedan enmascarados por el levantamiento de las restricciones sanitarias. En concreto, el mercado laboral perdió 100.200 trabajadores entre enero y marzo y distintas ramas de la actividad industrial, así como la construcción y el comercio minorista, ya sufren un descenso interanual por la subida de precios y la escasez de materias primas y determinados componentes cruciales para la actividad.

Aunque los datos anuales parecen seguir al alza, las cifras entre enero y marzo ya arrojan señales de deterioro. Por ejemplo, el numero de ocupados se redujo en 100.200 personas en los tres primeros meses del año. Es cierto que este descenso es habitual en el arranque del año, debido al carácter enormemente estacional de la economía española, pero también que en este caso se ve agravado por la ralentización económica, ya que el descenso es un 14% mayor que en la media de los años anteriores al coronavirus. Además, el número de parados también se ha incrementado en 70.900 personas entre enero y marzo, casi el triple de la media que en los años anteriores, hasta los 3.174.700 desempleados, en lo que supone el primer aumento del paro tras el inicio de la crisis del coronavirus. Como resultado, la tasa de paro se eleva 3 décimas, hasta el 13,6% de la población activa.

Frenazo industrial

Sin embargo, si hay un elemento en el que se nota el freno del mercado laboral es en las actividades que se están viendo más afectadas por la subida de los costes de producción y la falta de insumos, donde la contratación se ha frenado sustancialmente o donde, incluso, se llegan a producir descensos respecto a las cifras de 2021. Quizá el caso más paradigmático de esta situación, además de uno de los más perjudiciales debido a su efecto arrastre sobre otros elementos de la cadena de valor, es el caso de la industria automotriz, golpeada por la falta de chips y la subida de los precios de la energía. Este sector ha sufrido un descenso de la ocupación del 11,3% en el último año, con la pérdida de 28.200 puestos de trabajo. Hay que señalar que, aunque los problemas para este sector comenzaron hace varios meses, muchas empresas han aguantado el empleo a base de ERTE y paros técnicos, retrasando los ajustes de plantilla. Ese decalaje podría apuntar también a mayores deterioros en el futuro.

Pero el automóvil no se trata de la única rama industrial en negativo, ya que también se encuentran en esta situación el refino de petróleo (con un descenso del 37,8%), la fabricación de muebles (13,7%), la industria textil (10,8%), el tabaco (9,1%) o el caucho y los plásticos (3,9%) y la alimentación (0,5%). Hay que señalar que el mercado laboral ya partía de unas cifras mínimas tras el estallido de la pandemia, por lo que una caída del empleo supone, en muchos casos, hundirse por muy por debajo de las cifras de 2019. Y a estas industrias hay que sumar a las que, sin estar todavía en negativo, han sufrido un frenazo en la contratación en los últimos tres meses que augura un posible retroceso en un futuro próximo, como es el caso de la fabricación de material y equipo eléctrico, la maquinaria y equipo o las artes gráficas y grabados.

Además, la construcción de edificios ha perdido 12.300 trabajadores entre enero y marzo, en un trimestre que no suele ser malo para el sector, y acusa un notable deterioro interanual. Esto se puede deber tanto al fuerte incremento de los costes de determinados materiales necesarios para la construcción, como es el caso del acero, el cemento o el aluminio, como a la escasez de determinados perfiles profesionales. Y esto, a su vez, puede arrastrar a la baja otras actividades muy dependientes de este sector, como es el caso de la construcción especializada (fontanería, carpintería, instalación eléctrica…) como ciertas industrias (siderurgia, cemento, muebles, electrodomésticos…). Finalmente, el comercio minorista pierde 85.000 trabajadores respecto al mismo periodo del año pasado, lo que supone un retroceso del 4,6%. Esta caída se puede achacar en cierta medida a la inflación, al reducir la capacidad de compra de los españoles, pero también a la huelga de los transportistas.

  • Expansión
Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin

#LaConstrucciónEsParteDeLaSolución

#LaConstrucciónEsParteDeLaSolución

Noticias Artículos relacionados

X