Con ello, ha valorado que “nos ahorramos el tener que sacar a concurso quién hace el proyecto”, ya que “si vamos por delante y lo presentamos nosotros, habremos recortado el recorrido una pila de meses, que es lo que tratamos”.

“Es más barato para el Ayuntamiento desembolsar el costo de un espigón que el estar pagando cada vez que caiga un temporal arreglando las playas”, ha opinado Belón, una valoración que ha realizado tras el coste de 1,2 millones de euros que ha gastado el Consistorio en un contrato de emergencia para adecentar la costa de cara a la Semana Santa tras el último temporal de levante registrado en el mes de abril.

Sobre la ejecución del proyecto de estabilización de las playas del centro de la ciudad, ha incidido en que el Ayuntamiento, “como cualquier administración, lo sacaría a concurso -público-“, y por lo tanto, contaría “con las mismas garantías legales que Costas, pero con más rapidez burocrática puesto que depende del Pleno del Consistorio la consignación en los presupuestos de ese dinero”.

Por su parte, el vicepresidente de la Asociación de espigones emergidos, Paco Claro, ha valorado que si se le diera a los ayuntamientos “la posibilidad de que vayan haciendo estudios, en un periodo de 5 o 6 años tendríamos los espigones y unas playas dignas”, por lo que ha pedido a Costas que “sea clara”.

El representante del colectivo ha lamentado “el estado de las playas de Marbella”, al tiempo que ha criticado que “en otros lugares como la Costa Brava o Levante se han hecho los espigones que en su día también les quitaron, y que aquí no conseguimos tener”.

“Tenemos unas playas lamentables en la Costa del Sol y en Marbella, donde vivimos del turismo”, ha señalado Claro, quien ha cuestionado “por qué cuesta tanto hacer algún tipo de inversión” en la zona y que el Ministerio deje fuera de los proyectos de estabilización las playas más céntricas como son las de La Venus, San Ramón y La Bajadilla.