De acuerdo a los pliegos, que están abiertos al público en la Plataforma de Contratación del Estado, el objeto del contrato es la asistencia y el control técnico de la obra. El adjudicatario también deberá realizar un seguimiento económico de la actuación, además de prestar atención al cumplimiento de las condiciones ambientales, de calidad y de seguridad previstos en los planes del Ministerio de Transporte.

El contrato tiene un precio de licitación de algo más de 9 millones de euros y el plazo de presentación de ofertas caduca el 2 de septiembre.

La variante de Loja es una de las infraestructuras más esperadas en la provincia por el impacto que se espera que tenga de cara a la ansiada mejora de la red ferroviaria. El ramal evitará que la línea siga atravesando Loja, lo que permitirá que los trenes circulen a mayor velocidad y, por tanto, se reduzcan el tiempo en los trayectos que conectan con Granada en unos 15 minutos.

El proyecto, que estuvo bloqueado durante años, se ha reactivado en los últimos tiempos ante el interés del actual Ejecutivo por resolver los históricos problemas de conectividad que padece Granada.

El primer tramo, ubicado en la Venta del Rayo y que consta únicamente de un viaducto que sortea la línea convencional, ya está concluido. El segundo, donde se ubicará la nueva estación de Loja, se encuentra ya en obras y las máquinas trabajan para despejar el camino sobre el que se construirá la plataforma que dará soporte a las vías.

El tercer tramo, denominado A-92 por ir junto a la autovía, está ya adjudicado, aunque la actuación aún no ha arrancado. Por ahora se sigue con los trámites previos, según confirman fuentes de ADIF. El último de los segmentos en que se divide la infraestructura fue licitado a finales de abril por ADIF con un precio que ronda los 282 millones de euros.