- El gobierno municipal tiene en marcha una mejora integral de este parque estratégico con mejoras en los accesos y la revitalización del arbolado
Convertirlo en un parque de referencia. Ese es el objetivo a medio plazo del Ayuntamiento con los jardines del Prado. Se trata de una zona verde vital y situada en un punto estratégico de la ciudad –frontera entre el casco histórico y la Sevilla de la Exposición de 1929– que se inauguró en el año 1997. Desde entonces, este jardín que es visitado a diario por miles de sevillanos y turistas, ha sufrido una degradación constante sin que se haya acometido un plan integral para renovar sus instalaciones. Y eso es precisamente lo que persigue este ambicioso proyecto dividido en cuatro fases que mejorará la pavimentación, la accesibilidad, los caminos de albero, las fuentes ornamentales y que devolverá la vitalidad a los árboles. La inversión total cuando terminen toda las actuaciones superará los 1,8 millones de euros.
El parque del Prado de San Sebastián, construido entre los años 1994 y 1997, no goza del estatus de jardín histórico, pero se ha convertido en estos años en una gran lugar de ocio y esparcimiento para los vecinos y los miles de turistas que visitan esta zona. Dividido en cuatro niveles, cualquiera que haya paseado por allí en los últimos tiempos habrá advertido que el estado de conservación era más que mejorable: importantes desniveles en el firme, caminos que se encharcan cuando llueve, losetas rotas, problemas de accesibilidad, fuentes con los vasos rotos y con sistemas de saneamiento y circulación del agua obsoletos… Por ello, la delegación de Parques y Jardines, cuya responsable es Evelia Rincón, decidió apostar por la recuperación realizando una de las inversiones más importantes de este área.
Este periódico ha comprobado junto a María Luisa Iglesias, directora general de Parques y Jardines; Pedro Torrent, técnico municipal responsable del parque; y Jorge Alba, encargado de la empresa Valoriza, adjudicataria del mantenimiento, cómo avanzan unas tareas que ya han devuelto el lustre a parte del recinto. La intervención comenzó el pasado mes de octubre y en este tiempo se ha mejorado la entrada desde la Avenida del Cid, donde se ha sustituido la solería existente por adoquines de hormigón bicapa y se ha repuesto las piezas dañadas de granito en los pasillos laterales. También se ha eliminado el albero compactado y se ha sustituido por pavimentos permeables y suelos estructurales que permiten una mejor filtración del agua y un entorno más propicio para el sistema radicular de los árboles.
“Ya hemos ejecutado la primera y la segunda fase y ahora empezará la tercera. Emasesa también está interviniendo en un hundimiento y alumbrado público está reparando las fuentes. Queremos que el Prado de convierta en un parque de referencia para el esparcimiento y la diversión”, explica María Luisa Iglesias. La primera y la segunda fase han abarcado las zonas paralelas a las Avenidas del Cid y de Portugal. “Hemos quitado el albero de la entrada que se encharcaba y estaba en malas condiciones, puesto que entran muchos vehículos para las diferentes actividades que se hacen. Hemos puesto adoquines y se han renovado los caminos, ganando espacio para las zonas verdes”, añade Jorge Alba.
Los trabajos ejecutados son claramente visibles, sobre todo si se comparan con los de la zona que se intervendrá a partir de esta semana: la de la Avenida Carlos V. El equipo de la empresa Valoriza que se encarga del mantenimiento ha devuelto la estabilidad a las escalinatas que conectan las distintas terrazas desmontando los grandes bloques de granito para resanar toda la estructura, levantada por los árboles en muchos puntos. En los lugares donde era conveniente se ha eliminado uno de los escalones dejando solamente dos. Todas las rampas de los distintos niveles también se han rehecho.
En la cuarta fase se actuará en la gran explanada central de albero. “Haremos un tratamiento estructural del suelo. Se trata de ir poniendo sucesivas capas para que el árbol agarre mejor y tenga un crecimiento más adecuado”, incide Pedro Torrent.
Una vez que terminen estas intervenciones, probablemente en otoño, se actuará sobre la vegetación. Mientras tanto, ya se han ido agrandando parterres y alcorques. Igualmente, se han instalado algunos imbornales para mejorar la evacuación del agua y se siguen limpiando grafitis.
- Diario de Sevilla