Siempre que se cumplan todos los requisitos de planificación y permisos medioambientales pertinentes, está previsto que la planta se construya por fases en Dobinson Way, Europa Advance Road. El centro de clasificación, recuperación y almacenamiento de materiales esté operativo a más tardar en 2026. El proyecto incluye una planta de generación de energía a partir de basura que producirá electricidad.
El Gobierno de Gibraltar explica en una nota de prensa que una parte fundamental de su planificación para el caso de que se llegue a un desenlace no negociado (No Negotiated Outcome, NNO) (de las negociaciones en curso entre el Reino Unido y la UE sobre un tratado para la relación futura con Gibraltar) ha sido la revisión de las prácticas actuales de gestión de residuos, “con el foco puesto en aumentar la autosuficiencia de Gibraltar en este ámbito de una manera que también sea la opción más rentable en caso de que se cierre dicho acuerdo”. Para ello, el Gobierno gibraltareño publicó en julio del año pasado un proceso de licitación (Expression of Interest, EOI) para la provisión de una Planta de Gestión de Residuos (Waste Management Facility, WMF) tanto en caso de NNO como de cierre de un tratado.
Tras la selección de Recycle.gi como licitador preferente, el Gobierno ha acordado con esta empresa las condiciones para las instalaciones.
El acuerdo explicado por el Gobierno incluye:
- Un centro de gestión de residuos de última generación: esta instalación, pionera en Gibraltar, revolucionará la eliminación, clasificación y reciclado de residuos mediante el uso de tecnología punta.
- Creación de 50 empleos locales: la planta ofrecerá diversas oportunidades de empleo, desde puestos directivos a otros especializados en los sectores de gestión de residuos y energías renovables.
- Generación de energía renovable a partir de residuos: la planta, que será híbrida, convertirá los residuos en energía, que se incorporará directamente a la red eléctrica local de Gibraltar, con lo que contribuirá a la sostenibilidad y la independencia energética. También se prevé la potencial producción de energía eólica.
- Liberación de recursos críticos: al gestionar los residuos de manera local, Gibraltar puede reducir su dependencia de procesadores de residuos externos, lo que recortará los costes y cargas logísticas.
- Ayudar a Gibraltar a cumplir sus objetivos medioambientales: la iniciativa impulsará significativamente las tasas de reciclaje y reducirá la contaminación, en consonancia con las directivas medioambientales locales y de la UE, así como con los compromisos de Gibraltar con el objetivo de cero emisiones netas de carbono.
- Seguimiento y control de las emisiones: los avanzados sistemas de filtración garantizarán que las emisiones cumplan las normas más estrictas de la UE.
- Beneficios económicos para Gibraltar: los ingresos compartidos procedentes de los residuos reciclados y reutilizados supondrán una nueva fuente de ingresos para el Gobierno, que se traducirá en ingresos para el contribuyente y beneficios para la economía local.
- Mayor autosuficiencia y seguridad de los servicios: la planta reducirá la dependencia de la exportación de residuos a España, lo que garantizará que no se interrumpirán los servicios y mitigará los riesgos tanto en caso de NNO como de Tratado. Incluso en este último caso, los costes de eliminación de residuos aumentarán y la normativa será más gravosa en la UE.
El ministro de Medio Ambiente, John Cortés, consideró que el acuerdo es “un hito emblemático y generacional que beneficiará a las personas, al medio ambiente y a la economía”. “Esta planta proporcionará a Gibraltar la capacidad de separación y clasificación de residuos necesaria para aumentar significativamente las tasas de reciclaje y recuperación, así como la capacidad de tratar los residuos restantes cuando sea necesario. Por lo tanto, reducirá al mínimo la cantidad de residuos municipales enviados al vertedero, algo que la Unión Europea desaconseja cada vez más en un esfuerzo por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero”, subrayó. Este “objetivo clave” también está “consagrado en la Estrategia de Cambio Climático, el Plan Medioambiental a 25 años y los compromisos de Cero Emisiones Netas de Carbono de Gibraltar”.
Por su parte, el ministro principal, Fabián Picardo, se confesó “encantado” de que este acuerdo no solo cumpla los compromisos del Gobierno, “sino que los supere”. “Es un ejemplo más de la forma global en que este Gobierno está actuando en favor de las personas, el empleo, la economía y el medio ambiente”, apostilló.
“El desarrollo de esta planta de gestión de residuos demuestra que nuestro extenso trabajo sobre resiliencia en caso de un NNO ha dado lugar a mejoras reales en nuestra forma de hacer las cosas, que beneficiarán a generaciones de gibraltareños, incluso aunque cerremos un tratado”, relató. “Mientras seguimos trabajando seriamente para alcanzar un acuerdo con la UE, continuamos encontrando soluciones nuevas e innovadoras a problemas complejos e históricos, que no solo nos beneficiarán localmente, sino que renovarán la forma en que Gibraltar interactúa con el contexto regional más amplio en el que vivimos y es percibido por él, en cualquier escenario”, concluyó.