Lo más llamativo a primera vista es el nuevo edificio de viajeros que se levantará en Andaluces, buscando que sea “una nueva puerta de acceso a la ciudad”. Una nueva terminal de unos 5.000 metros cuadrados que podrá construirse partir de los edificios ya existentes, a través de una ampliación, o bien con la creación de un nuevo edificio de viajeros. Además, el ministerio plantea la creación de cubiertas ajardinadas en este edificio “y de una nueva fachada panorámica que sirva de ventana a la Alhambra y Sierra Nevada“, para transmitir esa sensación de nuevo acceso a la capital.
“La solución que finalmente se adopte deberá, en conjunción con la solución de la playa de vías, aportar capacidad de operación de viajeros suficiente y responder a los actuales problemas de flujo de viajeros, dotando al edificio de la capacidad de explotación para operar los servicios ferroviarios previstos en los escenarios de demanda futuros”, reza el pliego.
Como referencia, en la propuesta de integración urbana del ferrocarril que fue compartida en septiembre de 2024 por el Ministerio de Transportes, el edificio histórico se conservaba y adquiría la función de vestíbulo de llegadas, mientras que el edificio nuevo (el construido para la llegada del AVE en 2017) se modificaba y ampliaba para acoger la función de vestíbulo de salidas, evitando así el cruce de viajeros y favoreciendo a través de una nueva plaza urbana la conexión con el tranvía del servicio de transporte Metropolitano de Granada.
Esta ampliación y creación de una entrada por el sur se podría topar con un problema inesperado: las vías del Metro y la parada Estación de Ferrocarril del mismo, que limitan con el edificio en esta zona, algo que podría condicionar la construcción. Sin embargo, el Ministerio pide a las empresas que en su anteproyecto contemplen un posible desvío o soterramiento de las vías del Metro, “para facilitar así que la estación pueda crecer sin límites”. De esta manera, el Gobierno se abre a la posibilidad de hacer obra e integrar el transporte público en la nueva imagen de la zona, o bien desviarlo para que este no afecte, cambiando el trazado actual.
“Si el edificio de viajeros tiene que crecer para asumir la nueva capacidad esperada para la estación, se debe plantear la posibilidad de desplazar o soterrar las vías del tranvía. Será necesaria al menos una propuesta donde la línea de tranvía pueda ser desplazada o soterrada a su paso por la estación de Granada, por si fuera necesario aumentar la superficie de la estación hacia el este para la adecuada explotación ferroviaria”, destaca el pliego de prescripciones técnicas.
Un posible soterramiento podría favorecer incluso los flujos de personas, ya que quienes usen este transporte público para llegar a la estación de tren directamente, ya sea con una entrada a la propia estación o a la puerta de la misma, al estilo de la parada de Metro de El Perchel en Málaga con el Vialia, en lo que se convertiría en un nuevo nodo para la movilidad granadina.
Un parque urbano de usos dotacionales
El edificio de salidas dará a una nueva plaza urbana que será destinada, según el proyecto del Ministerio, a edificios administrativos de Adif, zonas verdes, usos dotacionales e incluso hoteleros. Para ubicarlo, se trata del solar segregado de la estación por el trazado del tranvía, por encima de la piscina de Fuentenueva y junto al campo de rugby. Aunque hay que tener en cuenta que un teórico desvío de las vías del Metro reduciría la superficie útil de este parque urbano y sus usos complementarios.
En esta parcela se reubicarán edificios anexos de oficinas de Adif, incluyendo usos de operadores ferroviarios, y en el espacio restante se proyectaría un gran parque “con usos dotacionales, equipamientos, residencial, hotelero o cualquier otro uso que se considere de interés”. Este punto es clave, pues aquí es donde el Ayuntamiento de Granada podría obtener un valor para financiar su parte de la obra, a base de que en estos terrenos se construyan viviendas o incluso hoteles.
El propio informe lo destaca: “estos espacios, que hasta ahora han estado dedicados exclusivamente a funciones logísticas o ferroviarias, poseen un potencial significativo para ser transformados en zonas que generen un mayor valor económico y social” para Granada. “El consultor deberá desarrollar hasta la fase de Anteproyecto el diseño del parque, caminos, parterres, carril bici, y la implantación de los posibles usos en coordinación con el Ayuntamiento de Granada, en base a los intereses de ambas administraciones y tras un análisis de rentabilidad de las propuestas“, se menciona en el anteproyecto, recordando que la solución que se opte respecto a las vías del Metro podría modificar las dimensiones.
Accesos a la estación
Lo que más problemas puede causar en un futuro, sin embargo, pueden ser los accesos a una estación que se encuentra en pleno corazón urbano de la ciudad. El Ministerio asegura en el pliego de prescripciones técnicas que se deberán estudiar los accesos principales al ámbito de la Estación, y entre ellos destaca el acceso desde la Calle Severo Ochoa (que conecta con la GR-30 y para el que el Consistorio ya pidió un tunel subterráneo) y por el norte a través de la Calle Halcón o por la propia Avenida de Andaluces. “Estos accesos deberán ser objeto de estudio y diseño tanto para el tráfico general de viajeros con destino a la estación ferroviaria, como para el tráfico específico del transporte público que accederá a la estación proyectada”.
El Ministerio considera que será necesario estudiar y diseñar los accesos a través de Severo Ochoa, Halcón y Andaluces tanto para el tráfico general como para el transporte público, especialmente autobuses, que accederán a la estación. “En este sentido, resulta imprescindible garantizar una intercomunicación fluida y funcional entre los accesos principales, el intercambiador de autobuses y el aparcamiento de la estación, de manera que el conjunto de infraestructuras opere de forma integrada y eficiente”. Estas actuaciones viarias, aunque están directamente vinculadas al funcionamiento y accesibilidad de la nueva estación, “deberán considerarse parte integrante de la red urbana, por lo que su diseño, trazado y ejecución deberán ser objeto de coordinación con el Ayuntamiento de Granada”, asegura el pliego.
Por lo tanto, lo que se acabe haciendo con los accesos deberá ser resultado del análisis en el estudio de movilidad, de forma integral, tanto de la problemática de la situación actual de acceso a la estación. “Por el lado este igualmente se debe estudiar la posibilidad de acceso soterrado entre la Avenida Severo Ochoa y el intercambiador de transportes, lo cual aportaría una comunicación más directa y fluida a la circulación del transporte público”, asegura el informe.
Parque sobre el aparcamiento y zona de ‘Kiss&Train’
La redacción del anteproyecto de la integración del ferrocarril en la ciudad contempla el cubrimiento y la ampliación del aparcamiento de vehículos anexo a la estación, que colinda con las viviendas del barrio de Los Pajaritos. Este cubrimiento permitirá una continuidad de la Calle Halcón y mejorará las condiciones de las viviendas perimetrales a la parcela ferroviaria. “En función de las conclusiones del estudio de movilidad del entorno y la demanda estimada, se podrán aumentar el número de niveles del futuro aparcamiento, que en caso de realizarse será bajo rasante (es decir, subterráneo) para evitar el impacto visual en el barrio”, destaca el pliego de prescripciones técnicas.
“Sobre la losa de cubrimiento se propone realizar un parque urbano con un posible equipamiento dotacional o terciario sobre el mismo”, algo importante en términos económicos para el Consistorio, al igual que con el parque junto a la estación. “En el anteproyecto y en coordinación con el Ayuntamiento de Granada se deberá estudiar la integración de estas soluciones”. La actual rasante del aparcamiento deberá reducirse para que el futuro cubrimiento tenga el menor impacto en los bloques de viviendas aledaños y no suponga una ruptura con la ciudad sino una continuidad peatonal de la actual Calle Halcón.
Además, el Ministerio confirma que se creará una nueva zona de Kiss&Train frente a la actual estación histórica, o lo que es lo mismo, un apeadero de viajeros que lleguen en coche, en una fórmula similar a la de un beso y adiós que ya se está implantado cada vez más en los colegios. También se prevé la ampliación del patio de coches de la estación y espacios para bicicletas y patinetes.
Por el lado sur se propone una nueva plaza que permita acceso y conexión de la estación con el tranvía, las futuras dársenas de autobuses y la Universidad. Se estudiará también la conveniencia de creación de una o dos pasarelas sobre la playa de vías que conecten el barrio de Pajaritos con la zona de la Universidad.
Mirador sobre Camino de Ronda
Aprovechando la posición elevada del viaducto de Camino de Ronda sobre las vías, el el anteproyecto pretende o bien la reposición del mismo para su actualización, debido al estado de conservación que presenta, o darle continuidad para crear “una zona verde que se convierta en mirador hacia la Alhambra y Sierra Nevada”, lo que podría suponer un nuevo atractivo para la ciudad.
El proyecto pretende así dar un protagonismo especial al Camino de Ronda por su posición elevada respecto a la playa de vías y la estación. Actualmente desde el viaducto de Camino de Ronda existen vistas hacia el monumento nazarí y hacia Sierra Nevada que no son interrumpidas por ningún edificio, y que se quieren aprovechar. De esta forma, según el informe, “se pretende mejorar la zona creando un mirador urbano y un parque que pueda dar continuidad hacia el este en el máximo ámbito de la actuación, garantizando en todo momento la funcionalidad, seguridad y operatividad ferroviaria, con el objetivo de crear un gran espacio verde concebido como jardines panorámicos integrados en el paisaje urbano”.
“Se estudiará la continuidad del mismo en el máximo ámbito de la actuación, garantizando en todo momento la funcionalidad, seguridad y operatividad ferroviaria, con el objetivo de crear un gran espacio verde concebido como jardines panorámicos integrados en el paisaje urbano”, reza el pliego.
Para saber si se podrá construir, se analizará la viabilidad de su continuidad a ambos lados de la playa de vías, creando zonas verdes perimetrales a la estación y aprovechando su posición elevada dentro del contexto urbano. Asimismo, se analizará la viabilidad de su continuidad a ambos lados de la playa de vías, aprovechando su posición elevada dentro del contexto urbano, creando zonas verdes perimetrales que lleven hasta la estación sobre el aparcamiento de vehículos de la estación en el lado norte, y por el lado sur hacia el intercambiador de autobuses. “Se evaluará su conexión considerando distintas alternativas de integración, tales como accesos laterales o cubiertas ajardinadas y transitables donde se podrán albergar servicios complementarios, como espacios de restauración”.
En caso de darse esa continuidad, el cubrimiento del lado sur hacia el intercambiador de autobuses implicaría la demolición de la base de mantenimiento de RC existente en ese lugar, que se deberá tratar como un servicio afectado en el proyecto y reponerlo en la ubicación que defina el responsable del contrato.
“En lo relativo al cubrimiento de la playa de vías, esta actuación incluirá la impermeabilización de la losa y su protección. En lo que ha urbanización exterior se refiere, se desarrollará exclusivamente hasta la fase de anteproyecto. El consultor garantizará una solución óptima para que el Ayuntamiento de Granada pueda desarrollar posteriormente su proyecto de urbanización“, destaca el informe.
Pacificación de Rosaleda, Chana y Carretera Málaga
En el barrio de La Rosaleda, por donde el ferrocarril llega a la estación, se estudiará separar en lo posible las vías de las viviendas, que además se cubrirán en unos 500 metros con una losa sobre la que se habilitará un parque con nuevas vías peatonales, ciclistas y viarias. En la zona de La Chana, también se estudiará separar las vías de las edificaciones, elevando además su traza.
A ambos lados se habilitarán sendas zonas verdes, a modo de pantalla visual y acústica, y se construirán nuevos viaductos ferroviarios que permitirán el cruce bajo las vías, ampliando y mejorando las conexiones viarias actuales. Se trata del viaducto sobre Avenida de las Alpujarras (170 m), el viaducto sobre la calle Filólogo Julio Casares (25 m), y el viaducto sobre la calle Washington Irving (60 m).
Además, en el entorno del cruce del ferrocarril con la carretera de Málaga, se proyectará una nueva pasarela para peatones, independiente del paso inferior para la carretera, que también se renueva y se amplía. Además, se estudiará mejorar la conexión con el nuevo campus de La Azucarera a través de la implantación de nuevas vías ciclistas y peatonales.