Primeros pasos para que la Isla Cartuja cuente con un pabellón cubierto con 15.000 espectadores junto al estadio. La sociedad que gestiona el recinto está interesada en la construcción y explotación de un recinto multiusos para albergar eventos musicales, culturales, deportivos, así como desarrollar actividades comerciales, de ocio y de restauración, entre otras, de forma complementaria y coordinada con los usos y actividades que actualmente se realizan en el coliseo.

La implantación del proyecto se llevará a cabo en una de las cuatro parcelas próximas al estadio, aun por determinar. La finalidad de la consulta al mercado es definir inicialmente las líneas generales del pabellón. En el informe que tuvo acceso este periódico, los técnicos detallan información sobre las características fundamentales y urbanísticas de los suelos destinados al proyecto, así como las condiciones de explotación y financiación que hagan compatible su implantación con los usos y actividades que la sociedad realiza en el estadio.

Los operadores económicos interesados en la construcción y explotación del nuevo recinto multiusos pueden participar en la consulta preliminar al mercado. Los terrenos en los que la sociedad estadio olímpico (compuesta por la Junta de Andalucía con un 40%, el Gobierno con un 25%, el Ayuntamiento de Sevilla con un 19% y la Diputación de Sevilla con un 13%) implantará el pabellón se encuentran en el entorno del estadio. La primera cuenta con una superficie de 37.373 metros cuadrados destinada a aparcamiento en superficie. La segunda tiene 1.131 metros cuadrados correspondientes a una nave. La tercera cuenta con una superficie construida de 102.612 metros cuadrados con distintos destinos como almacén, hotelero, deportivo, aparcamiento y oficina. El cuarto suelo tiene una superficie de 73.176 metros cuadrados con un suelo urbano sin edificar localizado en la zona conocida como el huerto de los naranjos.

En el documento se apunta que la primera y la tercera parcela se encuentra afectada por una zona de conservación preventiva por el yacimiento arqueológico Isla de La Cartuja Norte según el Plano de Protección Arqueológica. En el último registro que fue elaborado en 2003, su estado de conservación se consideraba alto, justificado por “los metros de arenas que han ocultado las estructuras”. En este tipo de ámbitos, el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) establece que toda actividad que conlleve movimientos de tierra y que, por tanto, pueda suponer pérdida o deterioro del patrimonio arqueológico, deberá contemplar la supervisión arqueológica mediante la aplicación del control arqueológico de movimientos de tierra. La implantación del proyecto en esas dos parcelas podrá hacer necesario modificar los elementos del PGOU que resulten incompatibles con los nuevos usos, actividades y condiciones de edificación del nuevo recinto multiusos, que deberá ser tramitada una vez se concrete la parcela y el espacio que albergue el pabellón.

En los últimos años, el estadio de La Cartuja se ha posicionado como un referente nacional en la celebración de eventos musicales, deportivos, culturales y corporativos, acogiendo desde pequeñas reuniones hasta multitudinarios aforos. De forma complementaria a los citados eventos, la sociedad está interesada en promover la construcción y explotación de un recinto multiusos con capacidad para 15.000 personas en una de las cuatro parcelas situadas en las proximidades del recinto. La Junta ya solicitó al Gobierno 92 millones de euros de fondos Next Generation para construir esta nueva infraestructura junto al estadio.

El operador económico se encargará de su explotación durante un determinado periodo de tiempo en función del plazo de recuperación de las inversiones que sea necesario acometer. Durante el plazo de explotación del recinto multiusos, está previsto que ese operador abone unas cantidades económicas fijas y/o variable como contraprestación por el derecho a explotar el recinto.

En paralelo, la constructora Heliopol ha sido la designada para la reforma del estadio de la Cartuja consistente en la ampliación del graderío en 12.442 asientos. Desde la empresa apuntan realizarán la ampliación de las gradas, “lo que representa un desafío para la compañía, no solo por su envergadura, sino por el plazo de entrega: un nuevo anillo de gradas que deberá completarse en menos de seis meses”. El proyecto cuenta con un presupuesto de 15 millones de euros. Además de la ampliación de las gradas, incluye una reforma integral de los aseos, los espacios comunes y las instalaciones auxiliares. La obra será liderada por la línea de obra civil de Heliopol, con el apoyo de un equipo completo de edificación y un respaldo extraordinario de varios departamentos estructurales de la empresa. Como parte de este refuerzo, se incorporará al equipo miembros de la oficina técnica de obra civil en su totalidad, además de la colaboración especial del departamento de mejora continua que guiará los pasos de planificación técnica de la obra.

El Gobierno central ha eludido responder al PP en el Congreso sobre el plazo de finalización de la obra del puente del Centenario de Sevilla y, por primera vez, señala al Puerto de Sevilla como responsable de “nuevos requerimientos” que han generado parte del retraso de los trabajos, una acusación que el Puerto de Sevilla desmiente “rotundamente”: “el Puerto de Sevilla no ha realizado ningún requerimiento a las obras del puente del Centenario. Es rotundamente falso”.

Por último, el Gobierno reitera que el coste del puente va por 102.8 millones sumando el modificado.

Entre las razones de la demora que llevan las obras, el Gobierno incluye estos tres elementos en su respuesta oficial:

• “las nuevas reposiciones de los servicios afectados no incluidos en el proyecto original”
• “la modificación del tipo de acero empleado en la estructura para reducir el peso de esta”
• “los nuevos requerimientos planteados por la Autoridad Portuaria de Sevilla“.

En respuesta a una pregunta escrita en el Congreso planteada por los diputados del PP Rafael Belmonte, Juan Bravo, Soledad Cruz-Guzmán y Ricardo Tarno, sobre la fecha en que se terminarán las obras, sobre los motivos de los retrasos y sobre las modificaciones presupuestarias asociadas a los trabajos de ampliación del tablero y de sustitución de tirantes, el Ejecutivo de Pedro Sánchez evita tocar el tema de los plazos y solo responde sobre las dos últimas cuestiones, señalando por primera vez al Puerto de Sevilla entre las causas del retraso de la obra.

En los documentos que reproducimos bajo estas líneas se observan las tres cuestiones que formula el PP y la respuesta del Gobierno central.

Sin respuesta sobre los plazos

Sobre los plazos, el Gobierno central ya ni siquiera cita el último plazo oficial de 2026 “como muy tarde” que dio a finales de marzo pasado el ministro de Transportes Óscar Puente. La obra que iba a durar poco más de 27 meses (agosto 2021-finales 2023) ha sobrepasado los tres años e iba camino de dilatarse hasta 2026. El silencio estatal indica que podría dilatarse a 2027.

Medidas por seguridad marítima que planteó el Puerto en enero de 2022

Sobre los motivos del retraso, el Puerto de Sevilla ha negado “rotundamente” este miércoles que haya planteado nuevos requerimientos que retrasan la obra. “el Puerto de Sevilla no ha realizado ningún requerimiento a las obras del puente del Centenario. Es rotundamente falso”.

Las únicas condiciones que planteó el Puerto fueron en enero de 2022 a preguntas de la Demarcación de Carreteras para aumentar la seguridad marítima ante las penínsulas provisionales necesarias para acometer la obra del puente del Centenario.

Según el documento que ha podido ver este periódico, la Demarcación de Carreteras solicitó al Puerto de Sevilla autorización para la ejecución de las penínsulas provisionales necesarias para acometer la obra del puente del Centenario. El Puerto respondió que este proyecto inicialmente no afecta a las condiciones de seguridad marítima del canal de navegación de la dársena, pero que para “garantizar que tales condiciones se mantienen durante el transcurso de las obras de ejecución de las penínsulas provisionales, deberían tomarse las siguientes medidas“.

1. Realizar batimetrías de la zona afectada del canal de navegación que aseguren que dicho canal no sufre pérdidas de profundidad debido a operaciones de dragado y ejecución de las penínsulas.

2. Tomar las medidas necesarias para garantizar que no caen elementos de escollera dentro del canal de navegación.

3. Aportar cronograma con fechas y horarios de trabajo previsto, a efectos de comunicar los oportunos avisos a la navegación por la zona.

4. Detener los trabajos de dragado y de ejecución de las penínsulas durante el paso de buques por la zona, para lo que deberá mantenerse contacto continuo entre el Centro de Control de Servicios del Puerto de Sevilla y la empresa ejecutante”.